La tecnología conversacional abre nuevas posibilidades en la enseñanza que debemos aprovechar. Los chatbots bien diseñados pueden complementar la labor docente, más no sustituirla.

En la era de la revolución tecnológica, el papel de la inteligencia artificial (IA) se está expandiendo rápidamente en diversos ámbitos de nuestras vidas. Uno de los campos en los que su influencia es cada vez más evidente es el de la educación. En este contexto, los chatbots emergen como una innovadora y controvertida herramienta que plantea la siguiente pregunta: ¿Podrían los chatbots convertirse en los nuevos profesores del futuro?

Los chatbots son programas informáticos que simulan una conversación con usuarios humanos. En el contexto educativo pueden tener los siguientes beneficios:

• Accesibilidad: están disponibles 24/7, lo que significa que los estudiantes pueden acceder a ellos en cualquier momento y desde cualquier lugar.
• Personalización: pueden adaptarse a las necesidades individuales de cada estudiante.
• Motivación: pueden interactuar con los estudiantes de manera divertida e interactiva.
• Mejora del aprendizaje: pueden ayudar a los estudiantes a aprender de manera más efectiva y eficiente.

Los chatbots tienen el potencial de automatizar tareas administrativas y repetitivas, liberando así tiempo y recursos para que los profesores se enfoquen en actividades de mayor valor añadido, como la tutoría individualizada y el diseño de experiencias de aprendizaje innovadoras. Esto podría conducir a una mayor eficiencia y productividad en el proceso educativo, permitiendo a los profesores dedicar más tiempo a la interacción humana y la creatividad pedagógica.

Sin embargo, como ocurre con cualquier avance tecnológico, los chatbots también plantean desafíos y preocupaciones. Uno de los principales interrogantes gira en torno a la calidad y la naturaleza de la interacción humana en el aula. Si bien los chatbots pueden ofrecer respuestas rápidas y precisas, ¿pueden realmente reemplazar la conexión emocional y la empatía que un profesor humano puede proporcionar? ¿Cómo afectaría esto el desarrollo socioemocional de los estudiantes? También se cuestiona la privacidad y seguridad de los datos de nosotros los usuarios activos. Por tanto, este tipo de tecnología debe diseñarse teniendo claro el tipo de información que recopilarán y cómo será utilizada. La transparencia y ética deben ser una prioridad.

Además, existe la preocupación de que la dependencia excesiva de la tecnología pueda llevar a una pérdida de habilidades sociales y cognitivas en los estudiantes, así como a la exclusión de aquellos que no tienen acceso a la tecnología o no pueden interactuar con ella de manera efectiva. Es crucial encontrar un equilibrio entre el uso de la tecnología y la preservación de los valores fundamentales de la educación.

En mi experiencia como docente, he empleado chatbots para suministrar información adicional sobre los temas que estamos abordando en clase, responder preguntas de los estudiantes y asistirles en la resolución de problemas. Considero que constituyen una herramienta invaluable para mantener su motivación y participación en el proceso de aprendizaje. Recientemente, logré un avance significativo al crear un chatbot para un diplomado que completé sobre economía social y solidaria. Este recurso está siendo explorado y utilizado no solo por los estudiantes, sino también por colegas interesados en el tema.

Algunos de los chatbots educativos populares y funcionales son:

• Duolingo: Una aplicación de aprendizaje de idiomas que utiliza un chatbot para ayudar a los estudiantes a practicar sus habilidades conversacionales.
• Socratic: Una aplicación de Google que utiliza un chatbot para ayudar a los estudiantes a resolver problemas de matemáticas y ciencias.
• La_brujula_ESS: Chatbot que diseñé y cree para resolver dudas y preguntas sobre la economía social y solidaria.
• ChatGPT, Gemini y Claude: Son chatbots de modelos grandes de lenguaje que puedes personalizar para que tengan una función específica: tutor virtual, asistente, colega, etc., de acuerdo con la instrucción que le des (prompt) será el resultado que obtienes.

Por supuesto, la efectividad de un chatbot dependerá de cuan avanzada sea su inteligencia artificial. Hoy en día aún tienen limitaciones para comprender contextos complejos o abstractos. Pero la tecnología conversacional está en un momento de rápido progreso gracias a modelos de procesamiento de lenguaje natural (PLN) más potentes.

Soy fiel a la creencia de que los chatbots no son una amenaza para los profesores. No son capaces de reemplazar la interacción humana que es tan importante en el proceso de aprendizaje. Pero si pueden ser una herramienta prometedora para mejorar la calidad y personalización de la educación, son un artefacto poderoso para complementar la enseñanza tradicional y para ayudar a los profesores a llegar a más estudiantes de manera más efectiva dentro de nuestra #CiudadDigital.

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Publicado originalmente en e-consulta.