Los libros de textos han levantado una polémica inusual, para ser los libros de texto, pero ya común tratándose del gobierno de la 4T. Me parece que los opositores del gobierno en turno están tratando de desacreditarlos lo más posible dado que la carrera por la Presidencia ya ha sido adelantada y los opositores no quieren que haya otro gobierno de Morena.

El problema que los defensores de las “buenas costumbres” y la “buena moral” han puesto sobre la mesa acerca de los libros de texto, es que presentan errores gramaticales y de contenido; que se habla de comunismo, del movimiento del 68 y hasta de Ayotzinapa, o se tratan temas de sexualidad con los niños, niñas y adolescentes, o bien que son mucho más breves que otras versiones de los libros de texto, además de que tienen una gran carga ideológica. Así que a continuación explico cómo veo esto y cuál pienso que es el verdadero problema sobre el tema. 

Empezaré por la carga ideológica. Todas las versiones de los libros de texto, desde aquellos en los que en la portada estaba la madre patria han tenido cargas ideológicas, y justo esa portada es un ejemplo de la ideología que se promovía en los tiempos del presidente López Mateos, “la patria”, nuestra unidad, un solo país que estaba bastante representado por la clase media, que era a la que había que empujar y fortalecer porque era la fuerza laboral que movía a este país.  

El comunismo, el movimiento del 68 y el caso Ayotzinapa, son ya hechos históricos, recientes y lejanos que son parte de nuestra historia local, nacional y mundial que hay que entender, para comprender el mundo en que vivimos. Si no enseñamos esto, podría ser un grave error, como lo hubiera sido, no aprender de la revolución francesa, la revolución industrial o la segunda guerra mundial en los años setenta. Estudiamos el pasado para entender nuestro presente. No veo ningún problema en que las nuevas generaciones aprendan cómo se ha movido el mundo.

Los contenidos sobre sexualidad, desde que me acuerdo han sido los temas tabús. Padres y madres que no ven mal que sus hijas e hijos los aprendan y padres y madres que ponen el grito en el cielo porque hay imágenes gráficas en los libros de texto sobre los aparatos reproductores, creyendo que sus hijas e hijos irán directo a la vida sexual si aprenden estos contenidos. Quisiera decirles a estos padres y madres, que sus hijos están yendo a estos contenidos con la guía de un adulto bien o mal intencionado o sin esta guía y por su propia cuenta porque están descubriendo su cuerpo. Los adolescentes están teniendo una vida sexualmente activa a edades cada vez más tempranas, por curiosidad, porque alguien abusa de ellas o ellos, porque quieren experimentar o porque la información está al alcance de un click en sus dispositivos electrónicos. Y en la red encuentran buena y mala información sobre cómo ejercer su sexualidad. Es mejor que se aprenda de profesionales informados y capacitados para atender estos contenidos y de sus propias madres y padres. Además, con la orientación debida para que tomen decisiones más asertivas. Las y los adolescentes, tarde o temprano enfrentarán su sexualidad y tendrán una vida sexual activa, es mejor que lo hagan con elementos y formación para tomar buenas decisiones.  

Hay una razón clara para que los libros de texto sean breves y menos extensos. Los nuevos planes de estudio pretenden que las y los estudiantes aprendan con base en problemas hasta cierto punto complejos que se resuelven desde diferentes disciplinas. Se pretende que estos problemas sean planteados por las y los estudiantes porque son problemas de la vida real y a partir de estos, se defina cómo estudiarlos y una vez que se comprenda cuál es la raíz de cada problema se establecen propuestas de solución para atenderlos.

Esto porque hay una fuerte crítica a que la escuela hasta ahora, ha impartido los contenidos fragmentados y separados, esperando que las y los estudiantes los integren cuando enfrentan un problema de la vida real. Pero esto no siempre sucede, entonces los nuevos planes de estudio plantean que haya problemas complejos que se resuelven desde diversas disciplinas y las y los estudiantes junto con sus profesores definen qué deben saber para entender el problema en toda su complejidad y después buscar las soluciones al mismo.

En realidad, se pretende preparar de una manera totalmente diferente a las nuevas generaciones, lo que a mí me parece realmente significativo e interesante porque la SEP ha hecho lo mismo y de la misma manera por más de cien años y ese modelo ya estaba más que agotado y ahora se pretende hacerlo de una manera diferente, por lo que felicito a quienes hayan tomado esta decisión. Sin embargo, la crítica es que salieron los libros de texto, pero no se han dado a conocer los planes de estudio. Aquí es importante señalar que planes de estudio y libros de texto siempre van de la mano, junto con un libro para el profesor. Entonces supongo que la guía de las y los docentes serán los libros de texto. Por otro lado, no tengo claro cómo se está formando a las y los docentes para enseñar con base en problemas. No puedo asegurar que no se esté formando a las y los docentes, supongo que están ahora en tiempo de preparación, pero esto debería ser con base en los planes de estudio y no sólo apoyados en el libro del profesor, por eso me preocupa que los planes de estudio estén aún en proceso.  

Aunque de buena fuente sé que una parte de los planes de estudio serás definidos por las y los profesores en función de problemas de la localidad en la que está inserta la escuela. Lo que también es un acierto. Posiblemente por eso no han salido a la luz eso ansiados planes de estudio.  

Publicado originalmente en e-consulta